La refrigeración de los alimentos

La refrigeración de los alimentos -dejando de lado los alimentos no perecederos cuando se encuentran cerrados- es imprescindible para el correcto mantenimiento de los mismos, y para su larga duración. La gran ventaja de la refrigeración de los alimentos es que no produce modificaciones en ellos. Sin embargo, es importante tener en cuenta que cada alimento es diferente, y que la necesidad de refrigeración o congelamiento varía dependiendo los tipos alimenticios que se consumen. Los dos aspectos fundamentales que te permitirán refrigerar los alimentos como lo necesitan son el respeto por los tiempos de refrigeración y congelación ideales; y contar con un refrigerador que permita organizar la comida de acuerdo con los hábitos de consumo, y que controle los niveles de humedad.

Cómo organizar la refrigeración de los alimentos

La forma en que se encuentran diseñados los refrigeradores no es azarosa, sino que tiene un motivo de ser. Las separaciones que presentan te ayudarán a organizar los alimentos, que deben situarse teniendo en cuenta algunos aspectos:

  • Los alimentos en la nevera se deben situar según su frecuencia de uso: en el caso de los lácteos, yogur y lo que se utilice para el desayuno, se recomienda ubicarlo en la parte superior ya que es un sitio de acceso rápido. Las proteínas, en cambio se recomienda ubicarlas en la parte inferior del electrodoméstico. Allí no se congelarán y se evitará cualquier tipo de contaminación en caso de goteo. Existen algunos refrigeradores que fueron diseñados con la posibilidad de graduar la temperatura por compartimento. Esto presenta la ventaja de poder refrigerar alimentos de distintas características, separado por compartimentos, y a diferente temperatura.
  • En el momento de almacenar y distribuir los alimentos en el refrigerador, es importante también tener en cuenta la caducidad de los alimentos. Aquellos que caducan más temprano, es recomendable almacenarlos en la parte de adelante del aparato. De esta manera, estará más a la vista y más al alcance de la mano. Al tenerlo a la vista recordarás que debes consumirlo para evitar la descompostura.

La refrigeración de los alimentos es importante para no generar deshechos innecesarios por mal almacenamiento, y para el mejor aprovechamiento de los productos que consumes.